Microsoft ha anunciado recientemente que los usuarios de Windows 10 podrán extender el soporte de seguridad del sistema operativo más allá de su fecha de fin de soporte en octubre de 2025. Esta extensión de seguridad estará disponible por una tarifa anual de $30 USD. Esta es la primera vez que Microsoft ofrece este tipo de servicio para los usuarios domésticos, ya que anteriormente solo los clientes empresariales y educativos podían acceder a actualizaciones de seguridad extendidas.
Aunque esta medida es algo extraña, puede ser una buena noticia para aquellos que no pueden o no desean actualizar a Windows 11 debido a limitaciones de hardware antiguo ligado al famoso TPM 2.0, es importante tener en cuenta que las actualizaciones de seguridad extendidas solo incluirán parches de seguridad esenciales. No se proporcionarán nuevas funciones o características nuevas de Windows, corrección de errores ni soporte técnico por parte de Microsoft.

Microsoft ha señalado que el programa de Actualizaciones de Seguridad Extendidas (ESU) comenzará a estar disponible a medida que se acerque la fecha límite de soporte en 2025. Además, Microsoft continuará proporcionando actualizaciones de seguridad para su Antivirus hasta al menos octubre de 2028, ofreciendo una capa adicional de protección para los usuarios de Windows 10.
Esta decisión refleja el reconocimiento de Microsoft de la cantidad significativa de usuarios que aún utilizan Windows 10 y los riesgos potenciales de dejarlos sin protección. Aunque la compañía sigue incentivando a los usuarios a migrar a Windows 11, lamentablemente los requisitos son elevados, obligando a los usuarios comprar hardware nuevo y moderno, específicamente una placa base compatible con el chip TPM 2.0. Esta opción de actualización de seguridad extendida es una solución temporal para aquellos que necesitan más tiempo para hacer la transición.